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martes, 10 de marzo de 2020

NUEVO ORDEN DE RELACIONES EN ALGARROBO. UNA PROPUESTA

Por Patricio Mansilla Potocnjak
Comunicaciones

¿Qué nos enseña la experiencia de vivir bajo una amenaza de una epidemia como la del Coronavirus?. Bueno, desde tiempo muy ancestrales existe una máxima que es que lo primero que debemos hacer en la vida es cuidarnos a nosotros mismos y luego ocuparse del cuidado de los demás. Y ¿Qué es cuidarnos a nosotros mismos?, Ocuparse de la salud alejándose de lo que pudiera hacerle mal, cuidar la higiene, cuidar el estado emocional y aprender. 

En este caso específico debemos: Estornudar en el ante brazo y no en las manos, no tocarse la cara con las manos, lavarse las manos cada vez que tome algo público, limpiar frecuentemente escritorios, celulares, computadores, entre otros, no acercarse tanto a una persona que este resfriada, 2 metros mínimo, entre otros. Esto está muy bien, pero también debemos pedirle y enseñarle al otro que haga lo mismo, sino no funciona. Todo este proceso hasta hace poco nadie lo hacía , no era necesario, por lo tanto obliga a cada persona a un cambio de conducta. Lo notable de todo esto, es que todos creemos que estamos en un problema serio y debemos actuar en consecuencia. Y eso se parece mucho a otras situaciones que como sociedad nos pasa.
Pero también esta situación obliga a confiar en el otro y a confiar en las autoridades. Entonces qué le pedimos a los demás: que se ocupen de ellos mismos en esto como esta dicho¿ y a la autoridad?, que mantengan el control de actividades masivas, que entreguen datos correctos y oportunos, que los espacios públicos estén limpios, que las personas de sanidad se cuiden y ayuden efectivamente, tener salas higiénicas, entre otras cosas.

Y cuales son los errores en esto: tener pánico, que el miedo sea descontrolable, no saber interpretar la información, desconfiar del otro, no ayudar para informar, propagar rumores, hacer política para dividir, no cumplir los protocolos establecidos, entre otros. 

Todo este cuadro nos puede hacer conversar y empatizar para lograr sortear el problema o todo lo contrario, alejarse y no empatizar por el motivo que sea. Cómo se podrá entender una es más positiva que la otra. También, como en todas las cosas, hay de todo en la viña del Señor como se dice, y también como en todas las cosas, el que tiene la mayoría impone una conducta. Esto es muy importante, si la conducta negativa gana habrá perdidas y descontrol, si gana la positiva, se evitaran pérdidas para controlar cualquier situación que nos afecte como epidemia o como en cualquier cosa social. Y podríamos decir también, que esto está ampliamente comprobado.

¿Cuál es la Propuesta?, pongámonos de acuerdo para reconocer el problema y actuemos cuidándonos a nosotros mismos y luego ocuparnos de los demás y de lo que nos rodea.

" Las opiniones vertidas son de exclusiva responsabilidad de quien las emite y no representan necesariamente el pensamiento de Algarrobo Digital "

1 comentario:

  1. Exactamente, necesitamos este tipo de tejedores de sociedad. Que impulsen un desarrollo de las personas de manera integral enfocados en problemas y soluciones verdaderas y estables.

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