“VIBRATO”. ISABEL MELLADO. SELECCIÓN DE PÁRRAFOS. Boletín Literario N° 239. Sección Literaria

Para quienes gustan de la buena literatura

Boletín literario preparado por Eduardo Trucco B. (*) en el cual ofrece una selección de párrafos, invitando a compartirlos y comentar.

"Vibrato". Isabel Mellado

“VIBRATO”. Isabel Mellado. Alfaguara, 1ª edición: agosto de 2017. Chilena, escritora y violinista. Obtuvo beca Karajan, lo que la llevó a vivir a Berlín. Comentarios sobre la obra: “Vibrato es una novela sensorial que acompaña al lector por el laberinto del oído.” “Voy a extrañar este mundo apenas cierre el libro...es lo que pensé desde que entendí la loca lucidez de sus personajes y la belleza de sus revelaciones.” “Una escritura aguda y cariñosa. Cercana y a la vez llena de extrañeza.” Esta obra seguramente va a animar, “despertar”, a muchas lectoras. Las citas fueron seleccionadas especialmente en razn de ellas. Una buena obra para comenzar el verano.

SELECCIÓN DE PÁRRAFOS:

  1. Casi me llamo Marta. Marta era el nombre de la amante de mi padre cuando nací. Pág. 11.

  2. Traía la mirada desocupada, pero ya la edad comienza, mis edades. Pág. 13.

  3. Me aburro y lloro. Percibo más brillantes los colores así, húmedos de lágrimas. Pág. 14.

  4. Un padre. Cuánto lo quise. Mi padre y su pena. Pág. 15.

  5. Adelgazó mucho. Cuando lo volvimos a ver, su mirada también era huesuda. Pág. 20.

  6. Si Dios nos escuchaba, yo no lo tenía tan claro. Pág. 22.

 7. Un buen vino también se escucha, decía mi padre mientras vaciaba la botella en su copa predilecta. Pág. 27.

  8. Quién sabe si el silencio es la pequeña libertad del hombre. Pág.28.

 9. De la noche a la mañana comenzó a hacer música con su violín, mientras yo continuaba organizando ruidos. Pág. 29.

10. En otros idiomas, tocar el violín es ‘jugar’, dijo el profesor. Jugar con tiempo era mejor aún que jugar con tierra.

11. Su cara era un disparate, casi tan mal organizada como su conversación. Pág. 31.

12. El mar era un solitario compás practicándose a sí mismo sin descanso. Pág. 33.

13. Toque de queda, incertidumbre. Días necios se cuelan, mal avenidos con cualquier día anterior y toscamente encadenados a los días siguientes. Pág. 44.

14. Descubrimos otra ciudad en la boca. Pero tanto la música como las ciudades y los besos no se dejan resumir. Pág. 47.

15. Marcelo, amor de cintura para arriba. Nos mirábamos casi hasta llegar al centro y retrocedíamos asustados.

16. Y yo que no paro de admirar su hechura, la resonancia azul de su piano y de su pelo. Su mirada, un sonido placentero que cuelga de sus ojos. Su mirada se cuela en mis oídos. Cuando ya nos hemos despedido, vuelvo a escuchar su mirada tan grande en ojos pequeños. Pág. 48.

17. Quiero comprenderlo y lanzo como una red mi oído, lo más lejos, lo más adentro que puedo, necesito escuchar mejor, como mi hermano. Pág. 50.

18. Un temblor benévolo el vibrato. Temblor voluntario. Parecía venir de mucho antes, de tan intenso. Pág. 53.

19. Vivir de la música y que la música viva de uno suena justo. Pág. 54.

20. Es fundamental que sepas hacia dónde va la frase, que conozcas y honres la forma, la estructura. Pág. 56.

21. El músico sabe ver esa tensión con el microscopio de su oído y la incrementa con sus manos.

22. No existe en este país el libre albedrío, lo sabes, no decidimos qué podemos decir, pero sí, cómo lo decimos. Pág. 57.

23. Cada cual quisiera ir por su cuenta, pero un buen ritmo nos ata en racimos. El ritmo es la mejor tribu. Pág. 63.

24. – Esta violinista no está mal, entiendo que les impresione, hace un dictado correcto de la partitura. Veloz de oído y dedos, pero lenta de sentimientos. Pág. 65.

25. – Es genial, tanta gente pegada a un instante, a un sonido. Pág.67.

26. Acariciándonos descubrí unos ojos llenos de buenos rincones. Pág. 71.

27. Él era leve, fulminante. En bicicleta o a pie, el cielo no alcanzaba a montarse sobre sus hombros. Pág. 72.

28. Andar en bicicleta es silbar con las piernas. Pág. 73.

29. ¿En qué se cansó la vida de tolerar tanta alegría?

30. ¿Y si el tiempo no pasa, tan sólo cambia de sitio? Pág. 74.

31. Mientras, los días crecen equidistantes. Días de ensayos superpuestos, pegados cual lonchas de queso. Pág.84.

32. …me alienta a confiar en los desconocidos, sin tener que partir de la nada. Advierto semejanzas como abreviaturas de carne, facciones recicladas del pasado afectivo. Pocos rostros parten sólo de sí mismos, son los originales.

33. Comparto allí habitación con Ulrike, violinista de Berlín oriental. Nos entendemos en un alemán prematuro o en silencio. Pág. 85.

34. Mientras el agua le lame los labios al grifo, estudio. Estudio mientras anochece en las copas de los vecinos. Pág. 90.

35. Él es hombre bien informado y sugiere que revuelva en ocho, porque leyó que está probado que es como menos se quema la comida. Pág. 96.

36. No borronea y fragua en profundidad cada tema. Pág. 100.

37. Escasas las horas y demasiados intervalos de vida que debíamos ignorar. O imaginar, porque los intervalos hay que oírlos dentro de la cabeza antes de interpretarlos para que salgan correctos, repitió tantas veces mi profesor que me quedó grabado. Pág. 104.

38. Tan perfecta la acústica del violín, su construcción, que no le es posible evolucionar. Sus dimensiones ya no cambian. Sólo lo perfecto merece ser eterno. Pág. 108.

39. Llevo tiempo sin vivir del cuerpo, viviendo sólo de los dedos y de mi violín, sin mirarme apenas. El cuerpo es biografía no autorizada. Pág. 112.

40. No quise competir con eso. Su dolor sentaba cátedra. Él era mayor que yo y era feo, así que me enamoré de su tristeza. Pág. 119.

41. Le parecí misteriosa, exótica, al comienzo. Es grato amar lo que se desconoce. Pág. 121.

42. Gritar no es hablar recio, Hans golpea las palabras hasta dejarlas moreteadas. Pág. 123.

43. Teníamos una forma de ver, de pensar y, lo más agotador, formas de comer y de escuchar muy distintas. Pág. 130.

44. – En el barroco la extravagancia, la singularidad es riqueza. Me parece un ejemplo a seguir. Pág. 134.

45. Donde hay ojos inteligentes, hay quizá cariño inteligente. Me hizo una seña. Pág. 137.

46. – Tienes razón. El miedo es un virus que sabe mutar. Pág. 143.

47. Porque, como decía un famoso pianista, el arte está en la unión de dos tonos, el acercamiento de un tono al siguiente. En el camino entre dos pequeños universos, cuando una nota se trasvasa en la siguiente, se vacía, es donde se reconoce el gran arte. Pág. 147.

48. Leeré un fragmento sobre zen, si te parece. Lo tengo subrayado para mis alumnos que se comen las pausas: En el zen, ma es palabra para nombrar el espacio vacío, un intervalo, un silencio entre dos notas.  O entre dos colores o sabores, o edificios, por ejemplo. Se encuentra tanto en ikebana como en el teatro Noh o en una bandeja de sushi. Este espacio ‘vacío’ da sentido y perspectiva a las partes que lo delimitan. Lleno de energía, induce a un estado contemplativo donde es posible apreciar la expansión del espacio y tiempo. Pero no confundir ma con ku; el vacío y el silencio con la ‘nada’. Pág. 148.

49. No seas siempre sutil, que eso aburre. Pág. 149.

50. En interpretación, en arte, las reglas de cortesía habituales no sirven. Goza la resistencia, el conflicto, la tirantez. Verás qué delicia.

51. Tú entra al escenario sin vanidad; sencilla y carismática al mismo tiempo. Pág. 151.

52. La veracidad está sobrevalorada. Creo recordar que en los convexos hay una advertencia acerca de la distorsión de las distancias o algo así. Pág. 185.

53. La mala música trabaja como un psiquiatra maquiavélico. Es injusto, Clara. Pág. 189.

54. - ¿No te tranquiliza que los sonidos, que la emoción se sustente en exactitud matemática? Pág. 197.

55. Pensé incluso en dejar el fagot. Pero sabía que la herida de no ser músico no cicatriza jamás. Pág. 201.

56. Somos pastores de música, sacaremos los sonidos a pastar. El director es el perro ovejero. Pág. 205.

57. Una hoja de árbol ensaya mecerse con sentido y yo busco rincones sin colegas para llorar a fondo. Los rincones saben de tristezas. Pág. 208.

58. – Todo es compás, tú lo sabes. Pág. 211.

59. Siempre es de noche en el vino. Pág. 212.

60. Olvidar no. Olvidar es faltarse el respeto, es desvivir. Pág. 221.

61. Llegó la hora esa noche, después de mucho hablar de nosotros, cuando lo cercano no quiso seguir acercándose, sino que comenzaba a distanciarse de nuevo. Sucede cuando la marea de la intimidad baja y queda al descubierto el pudor, el cansancio. Pág. 230.

62. Sin duda no supimos subrayar el vínculo, el gran arte de unir dos notas discordantes. Pág. 239.

63. No es que escuches más, es que ves menos. Pág. 246.

64. Era cierto entonces lo que escribió Hans en la primera de sus cartas, la que sí pude leer: Un gran amor no cabe en el corazón de cualquiera. Pág. 247.

65. La música ya no es bálsamo, no interrumpe el dolor. Pág. 251.

66. Huele tan a hueso de aceituna Primo. Anda todo mordido por la vida. Pág. 257.

67. No hay reglas. Lo mío es lo chico, lo efímero. Darle la posibilidad a un compás y al siguiente. No somos protagonistas de nada, Primo, te equivocas, somos personajes secundarios. Pág. 276.

68. Yo no soy de opinar a la rápida, Primo, y te digo, no sé ya qué es mejor. No juzgo. Pág. 277.

69. – Avanzar sin repetir, diletante, despreocupado, fresco. Descubrir y no perfeccionar nada.

      - ¿Soy así, Clara? Contéstame. Pág. 278.

70. Ojalá nos paseemos pronto por la bóveda del beso. Pág.285.

71. Me gusta cómo escucha este hombre a los alimentos, a la música, a mí. Habla suave y llevadero. Pág. 287.

72. Me vestí de mí misma, para luego desnudarme, más misma aún. Ahora debe ser medianoche. Pero no lo es, es algo mejor. El placer es un instante que no implica tiempo.

73. - ¿La tensión, dices? Me ayuda a concentrarme, a dejar lo superfluo de lado. Y sentirse cómodo haciendo arte no es algo que suceda constantemente. Pág. 291.

**** ****

(*) Eduardo Trucco Burrows, es abogado de la U. de Concepción. Reside en Algarrobo, en el condominio “Campomar” (camino a Tunquén).Ha estado ya casi dos años interviniendo por la defensa y protección de los ecosistemas de la playa de Tunquén, contra la invasión de inmobiliarias y demás personas que no tienen escrúpulo alguno en destruir toda la playa, el humedal y el santuario de la naturaleza. Lo que se presenta es un trabajo sencillo: leer obras escritas en español, subrayar lo que nos parece interesante, bello, atractivo, divertido o sorprendente; enseguida, haciendo una cuidadosa selección de todos los párrafos que se ha subrayado, se traspasan las citas – generalmente sin comentarios – al boletín.

**** ****

¡BIENVENIDO A UN NUESTRO ESPACIO DE OPINIÓN: PARTICIPA, COMENTA, OPINA, INVOLÚCRATE...! Te invitamos a leer y participar de nuestra sección “Comentarios”, pinchando al pie de esta noticia o artículo, en donde está en rojo la palabra “comentarios”. Algarrobo Digital entrega un espacio único en los medios de comunicación de Algarrobo para que la ciudadanía pueda expresarse libremente, con la única salvedad de hacerlo en forma respetuosa, sin injurias, calumnias ni descalificaciones. Escribe, identificándote,  qué piensas al respecto y sé parte activa del tema.