EL ROL Y COMPROMISO PRINCIPAL DE UN CONCEJAL CON SU COMUNA. Carta al Director

A propósito de la nota aparecida en canal TVCOSTA y de la denuncia realizada por el Concejal de la Comuna de Algarrobo, Sr. Boris Colja, quiero compartir una reflexión sobre el rol del Concejal, debido a que muchas veces entre la comunidad existe aún, un desconocimiento del papel que debe cumplir en su cargo quien es elegido en conjunto con el Alcalde. Hay diferentes tipos de liderazgos entre las personas que se presentan a este cargo, también una larga lista de candidatos cada cuatro años, todos queremos aportar desde nuestras capacidades. Sin embargo, no es tarea fácil la carrera en la Municipales, en nuestros pueblos, por que votamos por la persona, y esta, mientras más conocida, amiga de sus amigos sea, más posibilidades tiene, porque en estos casos, nos aseguramos la obtención de uno que otro pequeño favor, o valoramos el “trabajo social” que desarrolla, las colaboraciones en los bingos, rifas y todo tipo de ayuda personal, que está muy lejos de representar la verdadera esencia del cargo de un Concejal

Es cierto que es importante que el Concejal tenga la simpatía de la comunidad, que sea cercano y colaborador, que ayude en la solución de problemas que los vecinos le presentan a título personal, pero este no es el rol del concejal, para esto hay otros conductos municipales y es una práctica que fomenta el clientelismo que nosotros como ciudadanía no debemos alimentar, porque debemos priorizar el bien común, por sobre el personal.

El trabajo que hasta el momento ha desarrollado el Sr. Colja, puede que, a ojos de muchos, sea impopular o incomprendido, sin embargo, grafica una de las principales funciones que debe realizar y para que fue elegido concejal:

Fiscalizar las actuaciones de la primera autoridad comunal, como también de las unidades y servicios municipales, es un deber, porque velar por la protección del patrimonio municipal, el buen uso de los recursos, como también, el cumplimiento de los planes, proyectos y programas de inversión municipal, ejes también, del bienestar de la comuna y sus habitantes es su obligación y deber.

El Concejal no debe ser un mero observador, ni actuar desde la complacencia, fue elegido por la comunidad para que desde la mesa del Concejo, represente a la comunidad, por lo tanto, debe ser un estudioso de las leyes, ordenanzas, informarse e investigar todo lo que es materia de ser aprobado por él, asegurándose que todo se realice como la ley lo demanda, de no ser así, puede caer en actuaciones reñidas con la legalidad y en abandono de deberes. Hay que estar dispuestos también a estar a la altura de las circunstancias cuando es necesario, aprobar lo bueno, pero también, tener la valentía de ir contra la corriente, cuando hay situaciones que se dan al interior de un Municipio y son contrarias al actuar que deben seguir las administraciones comunales, como por ejemplo, este caso específico de los estacionamiento que fue aprobado por 5 votos a favor y 1 en contra, aun, cuando existían informes que solicitaban declarar desierta esa licitación, porque no se ajustaba a derecho y su aprobación era un riesgo para el patrimonio municipal.

Y para terminar, un concejal además de la fiscalización, tiene como facultad intrínseca a su cargo, la de impulsar iniciativas para el desarrollo de la comuna en áreas relevantes como educación, cultura, salud, entre otras, no se trata promesas vanas como muchos señalan. El Concejal comprometido con su cargo y con la responsabilidad que le adjudica la ciudadanía que lo elige, debe ser propositivo, puede y debe buscar consensos y apoyos dentro del gobierno municipal para gestionar recursos externos y solventar necesidades de una comuna. Sin embargo, es la comunidad la que también, debe ser responsable y consciente, de a quienes va entregar su apoyo y que es lo está valorando cuando elige a sus representantes.

Bernardo Arriaza Belmar