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martes, 6 de abril de 2021

NJUEVAMENTE LA CARTA A LA MINISTRA DE MEDIO AMBIENTE. Carta al Director

Ya publiqué esta carta. Es del 22-2-2021 y todavía no me ha sido respondida.
La publico de nuevo, con comentarios y preguntas al final:
Sitio 23, Condominio Campomar, 22 de Febrero de 2021.

Señora
Ministra de Medio Ambiente
Carolina Schmidt Z.
Santiago. Ref.: Ampliación de Santuario de la Naturaleza
“Humedal de Tunquén”.

Señora Ministra:
Me dirijo a Usted con todo respeto, pero con absoluta franqueza y – dentro de lo posible – sin ningún tipo de ambigüedades.

Como Usted sabe, soy abogado; además, propietario de un sitio y casa en el Condominio Campomar, comuna de Algarrobo, y gracias a una servidumbre constituida hace muchos años, con acceso a la playa de Tunquén.

Por si no lo hubiera advertido, soy el autor de la solicitud de ampliación del Santuario “Humedal de Tunquén”, presentado a ese Ministerio en Septiembre de 2017; en esa solicitud expongo, en síntesis, el fundamento jurídico que - a mi juicio - existe para que el Estado de Chile cumpla con su deber constitucional y proteja no sólo el Humedal, sino el conjunto de “ecosistemas” que en ese sector de la V Región se han dado y desarrollado con tan magnífica variedad y belleza.

En el mismo escrito, hago presente que mi análisis es principalmente jurídico y que dentro de un plazo breve y razonable, se presentará un importante estudio con todos los antecedentes científicos y técnicos (zoológicos, botánicos y sistémicos) que describen en detalle la riqueza del sector y todas las razones que avalan la petición de ampliación del Santuario. Limitar el Santuario al territorio y a la superficie original, sería un grave error, y así lo señala el propio Consejo de Monumentos Nacionales (CMN), según Informe cuyo párrafo más decisivo me permití transcribir en mi petición.

Ya han transcurrido casi 3 años y medio; se han hecho muchas gestiones, administrativas y judiciales durante este tiempo; se han sostenido muchas conversaciones; se han agregado cientos de antecedentes – relevantes o no. Lo esencial – que es lo que uno nunca debe olvidar – es simple: todavía no se ha acogido la solicitud de ampliación del Santuario, y el territorio que merece ser protegido – sobre todo si la Constitución y las leyes ambientales se respetan – se ve seriamente expuesto gracias a intereses mezquinos y a la miopía tradicional de algunos sectores de nuestra sociedad.

Debo suponer y entender que Usted conoce el lugar: la playa, los cerros circundantes, la flora y la fauna – que incluye aves migratorias que vienen a Tunquén, año tras año, como si fuera su segundo hogar. Poca gente conoce los detalles de ese complejo sistema de vida, vegetación y belleza que se ha logrado formar en Tunquén; y algunos saben del lugar, pero no entienden su importancia, su valor y su tremenda belleza y tranquilidad.

Quisiera desarrollar mis planteamientos haciendo una sencilla puntualización, y en cada punto tengo una o más preguntas que estimo son fundamentales; para no extenderme demasiado, sólo agregaré muy breves comentarios. Desde luego, agradezco su interés, disposición y paciencia…

1. En primer lugar, una observación y un comentario; la observación: pocas veces la Constitución Política se refiere a los “deberes” del Estado, pero un ejemplo es justamente el artículo 19 N° 8; esta norma, en su inciso 1° dispone que “Es deber del Estado velar para que este derecho no sea afectado y tutelar la preservación de la naturaleza.” El comentario: mucha gente, incluyendo abogados, jueces, funcionarios públicos que han jurado respetar la Constitución y las leyes, y algunos de los “expertos”, olvidan, pasan por alto o simplemente ignoran esta obligación.
El Estado no sólo tiene derechos; de la misma manera que nosotros – las personas – tiene también deberes. Por supuesto, que ese deber ha de ser cumplido, ha de ser respetado por todos.
2. ¿De qué manera podría Usted sostener que hace cumplir esa norma, si permite que contra el pensamiento técnico mayoritario y contra el sentido común, no se amplía el Santuario, y se afectan gravemente, incluso con su extinción, a los ecosistemas que allí se han desarrollado? ¿Es que el Ministerio cedió ante presiones de terceros – sean autoridades, sean políticos, sean empresarios? Tengo que suponer que Usted no tiene intereses económicos o patrimoniales en el sector y en la decisión que debe adoptar. ¿Es así? ¿Lo podría demostrar ante la ciudadanía?
Pero estas últimas preguntas son asunto personal suyo, y para cumplir con muchas otras normas, su respuesta tendría que ser negativa: es sólo por otras consideraciones que Usted podría dejar de cumplir con el “Deber” del Estado, al que Usted representa desde la perspectiva medioambiental. ¿Y qué otras consideraciones o razones podría esgrimir Usted, para que se destruya el Santuario? ¿Hay que construir un “barrio” en la playa? ¿Hay que favorecer a las inmobiliarias?
3. Si llegara a producirse un tsunami, y se ha construido en todo el sector vecino a la playa, sabe Usted o calcula cuántas muertes podrían producirse; un proyecto inicial, bastante básico y rústico, planteaba la construcción de más de 100 casas, sobre pilotes de 30 centímetros de altura. ¿Eso sirve de algo, ayuda en algo a los hipotéticos propietarios? ¿Podría Usted alegar que desconocía el riesgo que existe en esa zona? No parece verosímil. Y para excluir definitivamente esa opción, me permito hacerle notar que el año 2015, después de una extensa reunión con el Director del SHOA y otros funcionarios del mismo Servicio, recibí nota escrita del Contralmirante don Patricio Carrasco H., en la que me señala que el Servicio Hidrográfico y Oceanográfico de la Armada sólo puede hacer recomendaciones, pero que sus conclusiones técnicas no son obligatorias. La recomendación del SHOA es que no se construya bajo la cota de los 30 metros de altura. Si esa norma no se respeta, ¿la Ministra de Medio Ambiente será la responsable, en conjunto con el Ministro de Vivienda y Urbanismo, y el Director de Obras de la Municipalidad de Algarrobo?
Conociendo este antecedente, ¿qué podría alegarse en defensa del Estado de Chile, si se produce un evento trágico como el que hemos mencionado? ¿Qué podría responder Usted como Ministra del Medio Ambiente, ante la ciudadanía? ¿Que quiso favorecer a las inmobiliarias? ¿Que obedeció instrucciones del Presidente de la República?
4. Como sabemos, en mucha gente la codicia es más fuerte que la razón. Este es un antecedente psicológico y sociológico; como dicen los abogados, “es un hecho de la causa”.
Pero nada de eso justifica que la Ministra de Medio Ambiente ceda; que la Ministra deje de cumplir con “el deber” que impone la Constitución Política y la sana razón. ¿Va a actuar Usted contra una y otra? ¿Se da cuenta que pasará a la historia eco-política de Chile como la Ministra que permitió la destrucción del Santuario y de los ecosistemas que lo hacen posible? ¿No siente Usted algo más que vergüenza, de sólo imaginar que sea esa la imagen final que la ciudadanía tenga de Usted?
5. En mi presentación de Septiembre de 2017 señalo que, según se me ha comentado, algunos abogados del MMA sostienen que es imposible crear un Santuario si los propietarios de los terrenos no están de acuerdo. En la primera reunión que tuve con ejecutivos del Ministerio (señor Donoso, Jefe del Departamento de Biodiversidad y Recursos Naturales, y doña Pamela Fernández), me negaron en forma rotunda que eso fuera efectivo. Me hicieron presente que incluso hay un dictamen de la Contraloría General de la República que sostiene lo contrario: no se requiere la autorización o visto bueno de los propietarios afectados por la declaración de Santuario de la Naturaleza.
Y ese predicamento parece de toda lógica. ¿Quién, entonces, sostiene la contrario? ¿Quién piensa que si hay 2 ó 3 propietarios a quienes “afectaría” la decisión de ampliación, que se oponen, no sería legalmente factible esa ampliación? ¿Es que Usted piensa así? ¿Es el Presidente de la República quien quiere imponer ese erróneo criterio? ¿Han leído completo el artículo 19 N° 8 de la Constitución Política?
A nuestro juicio, sólo un lego en materia jurídica podría sostener que se requiere el consentimiento de los propietarios, para declarar la existencia legal de un Santuario de la Naturaleza. También podría sostenerlo un abogado con muy poca imaginación. Herramientas y recursos legales para declarar la ampliación, hay suficientes. No hacer esa declaración podría justificar una acusación constitucional y podría configurar lo que – con cierta liberalidad – podría calificarse como “delito ambiental”, “eco-cidio”. ¿La señora Ministra se va a hacer parte en un acto extremo de daño a nuestro patrimonio natural y ecológico?
6. Volviendo sólo por un minuto a algo ya planteado: si Usted ha estado en la playa de Tunquén, ¿se imagina todo el sector vecino al Humedal pletórico de vehículos, de locales comerciales, de vendedores ambulantes? ¿Usted no echaría de menos la tranquilidad del lugar, la belleza increíble de todo ese sector? ¿No es usted de las personas que disfrutan de la paz, de la tranquilidad, del sonido y música del mar? Más grave aún, ¿es Usted de las personas que dan mayor importancia al dinero que a la belleza natural? ¿Cree Usted que hay algo que pueda reemplazar la belleza que existe hoy día en la playa de Tunquén y sus alrededores?
7. En cuanto el MMA nos indicó que debía existir un grupo de personas o una institución que se hiciera responsable del manejo o administración del Santuario, recurrimos a la Fundación Kennedy, dirigida por el muy conocido y bien valorado “activista” ambiental, Peter Kennedy. Nuestra pregunta: “¿la Fundación se podría hacer cargo de esta tarea?”, no tomó por sorpresa al señor Kennedy y, de inmediato, acogió la proposición – que también fue bien acogida y aceptada por el MMA -, con el entusiasmo que lo caracteriza, pero con una sola pregunta o prevención: ¿Y, habrá financiamiento para desarrollar ese Santuario y proteger todo lo que merece ser protegido para las generaciones que vienen? No sabemos cuál podría ser la respuesta del MMA, pero sí estamos seguros de que será posible obtener financiamiento, tanto público como privado.
8. Todo lo que podamos agregar, parece innecesario en este momento y en este documento. Usted se lo imagina, o lo conoce, o podrá acceder fácilmente a ello.
La comunidad de la V Región entiende bien el tema y está en su gran mayoría a favor de preservar un lugar que es – de todo punto de vista – TRANSPARENTE. Es transparente, es frágil, es delicado, es fino; Tunquén es literalmente un tesoro; no de monedas de oro, sino de belleza del alma, de cercanía al cielo y a nuestra paz interior. En muchos sentidos es lo opuesto a Santiago, lo opuesto a las grandes ciudades; en Tunquén no hay nada tóxico. La belleza de Tunquén florece tanto con sol y verano, como con lluvia y frío y vientos fortísimos.
9. Un Santuario de la Naturaleza ampliado, y bien administrado, será una de las joyas de la V Región. Una joya que se ha venido tallando con los siglos. ¿Y la señora Ministra permitirá que esa joya sea destruida por gente insensible y bárbara?
10. La barbarie tiene que ver con la visión más burda de las Vida. Ese paisaje, esa belleza, esa magnífica fuerza del mar, se relacionan todas con la mitología, con la filosofía más fina, con el contacto que los creyentes sienten cuando se saben cerca de Dios. ¿Qué visión del Mundo y de la Vida va a favorecer la señora Ministra?
11. Esta carta va dirigida a Usted con extremo respeto y franqueza. Finalmente, el contenido de la misma es simple: que la solicitud sea acogida prontamente, antes que todo se pierda o destruya. No hay razón alguna – seria y veraz – para seguir dilatando la decisión favorable. La gente mezquina, guiada por la codicia y el interés o beneficio personal, no se interesa por lo que es Justo ni por la Verdad. La Justicia inclina la balanza hacia la ampliación del Santuario; la Verdad, es que Tunquén es un bien y un patrimonio de valor incalculable. Que no prime “el oscuro filo de la injusticia”: eso sería beneficiar a un pequeño grupo de especuladores, frente a la ciudadanía que busca disfrutar de la belleza única de Tunquén, su playa, su Humedal y sus ecosistemas.
Gracias por su atención. La saluda atentamente,

Eduardo Trucco Burrows

* * *
En lo que se supone es una especie de respuesta, recibí el 9-3-21 de la OIRS (oficina de Informaciones, Reclamos y Sugerencias), lo siguiente:
"Mediante la presente, y bajo el marco establecido en la Ley No 19.880, respondemos a su consulta registrada en nuestro sistema de gestión de solicitudes con el No 3-2021-RM-48, informando a Ud. lo siguiente:

Agradecemos su contacto, al respecto informamos a usted que con fecha de hoy, 08.03.2021, su solicitud fue ingresada a nuestra SEREMI del Medio Ambiente, Región de Valparaíso, a fin de entregar a usted una respuesta de manera pertinente y oportuna.

Agradeciendo su interés por la gestión medioambiental y quedando a su disposición respecto de otros requerimientos que Ud. necesite formularnos, así como sugerencias que nos permitan mejorar el servicio de atención que ofrecemos a la ciudadanía, saluda atentamente a Ud."
Honestamente, ¿ustedes dirían que eso es una respuesta de la Ministra? Este gobierno se caracteriza por NO RESPONDER cuando se advierte que cualquier respuesta que den, creará más problemas y más "ruido". Ni el Presidente responde, ni sus Ministros. Tengo ejemplos claros de esta irresponsable conducta de los que dicen que nos gobiernan.

La carta a la Ministra era personal, para que ella responda, no la OIRS, ni un subsecretario, ni una Seremi. 

Es la Ministra la responsable, y si no es ella, es el señor Piñera. ¿Ella calla porque le dieron una orden?
El país, la ciudadanía juzga y juzgará a los irresponsables, a los que ceden frente a las inmobiliarias, a los que causarán la destrucción del Santuario de la Naturaleza "Humedal de Tunquén". Son una verdadera pandilla, que ni siquiera da la cara. Mienten como condenados. Silencian sus fechorías. Como dijo alguien por ahí, "Es lo que hay...". Y probablemente no vamos a ver nada mejor...

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