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sábado, 27 de enero de 2018

PADRES DENUNCIANTES DE DISCRIMINACIÓN CON SU HIJA EN COLEGIO MUNICIPAL DE ALGARROBO, EXPONEN HOY SU POSICIÓN, EN CARTA AL DIRECTOR DE ESTE DIARIO


En nuestra Sección Cartas al Director, hemos recibo dos comunicados públicos relacionados con el caso de denuncia, iniciada a través de las redes sociales, de una discriminación recibida por una alumna del Colegio C. Alessandri de Algarrobo. Una, del Director del establecimiento, publicada el 3 de enero pasado (para ver pulsar aquí ) y la segunda, de la profesora aludida en la denuncia, publicada el jueves 25 recién pasado   (para ver pulsar  aquíl  )

Hoy, hemos recibido comunicado de los padres de la niña, lo cual publicamos íntegramente conforme a nuestra política de ser un medio abierto a la comunidad de Algarrobo, de libre expresión. Sin embargo, de momento que el caso ya está en los tribunales de justicia, nuestras publicaciones tendrán menor extensión dejando que la clarificación del hecho sigue un curso procesal propia de la justicia.

El jueves 25 recién pasado publicamos carta dirigida a la comunidad algarrobina de la educadora  que trabajó directamente con la alumna con discapacidad, cuyo complejo hecho -con diferentes visiones- fue noticia en diciembre pasado a raíz de denuncia de su madre en las redes sociales de grave discriminación. Situación que, finalmente, fue resuelta una vez clarificada las circunstancias. Hoy hemos recibido en nuestra Sección Cartas al Director, la visión y antecedentes de la apoderada y mamá de la niña.

Señor Director
Diario Algarobo Digital

Les envío respuesta del padre de Abril a la carta que ustedes publicaron en su medio local. No habíamos querido responder, pero ya que después de un mes de todo lo ocurrido, aún se siguen defendiendo (profesora y director) a base de palabras sin pruebas ni fundamentos, nos vemos en la obligación de responder por separado a ambas declaraciones.

Esperando que tengan a bien publicar también nuestras respuestas oficiales me despido quedando atenta a sus comentarios.

Maiza Cabrer

A la opinión pública, pero en especial a los Algarrobinos:

En respuesta a la publicación aparecida el miércoles 3 de enero de 2018, por parte del Director del Colegio Carlos Alessandri Altamirano, Señor Oscar Zúñiga Ulloa, en el sitio Algarrobo Digital (
www.algarrobodigital.cl/2018/01/director-colegio-carlos-alessandri-de.html ) es que tengo la obligación, como Esposo y Padre de la familia que hemos construido, y con la cual decidimos un día irnos a vivir a esta hermosa localidad, con el único objeto de tener una vida más plena todavía, de responder y aclarar nuestro punto de vista. Con esto, es mi deseo también bajar la tensión que existe hoy por hoy en las redes sociales, donde mucha gente, con un ánimo belicoso, contrario a nuestra intensión final, intenta poner un velo de duda ante la situación de discriminación vivida por Abril, la mayor de mis hijas.

1. En efecto, nos fue comunicado, que nuestra hija había sido dejada apartada del grupo curso por la Profesora de Educación Física. Si la dejó a cargo de algún otro profesional del establecimiento, o sola en la sala de clases (esperamos que además no haya cometido esa irresponsabilidad), es parte de una investigación sumaria, que lleva 10 meses en desarrollo. En este punto quiero detenerme, y establecer que se define como Discriminación como el acto de separar, violando la igualdad de derechos por cuestión social, racial, religiosa, orientación sexual, por razón de
género o por calificación de discapacidad.

2. En efecto, hicimos el reclamo correspondiente ante la dirección del establecimiento, la que nos comunicó, verbalmente, que debería seguir asistiendo a las clases de Educación Física con la misma profesora, pero “supervisada” por el equipo PIE. Al cabo de unas horas se nos informó que, la misma profesora de Educación Física, acompañada esta vez por otro Profesor de Educación Física, y durante el taller de deporte, a puertas cerradas en la sala de clases, habían indicado, bajo amenaza, y hostigando a los compañeros de Abril, que necesitaban saber el nombre de la persona que había llamado a la Mamá de Abril, porque esa persona sería “marginada de la clase, sin amigos y con un trato distinto al resto”, hecho que también está siendo investigado.

3. En efecto, personalmente acudí al colegio a informar que no enviaría más a Abril al por la sencilla razón que el establecimiento no me daba las garantías para asegurar la debida integridad emocional, ni física de mi hija, y que no lo haríamos hasta que estuviera resuelto el sumario administrativo, que lleva más de 10 meses en desarrollo.

4. Abril se integró mientras esperábamos la resolución del Sumario, a un Colegio de modalidad libre, en el cual continúo con su rutina escolar, y de paso, sanándose del shock emocional que para ella había significado toda esta situación, y esperábamos poder hacerla rendir exámenes libres para poder seguir con su tan anhelada escolaridad.

5. Al momento de inscribirla para rendir los exámenes libres, se nos indicó en el Departamento Provincial del Ministerio de Educación, en San Antonio, que solicitáramos al Consejo de Profesores del mismo establecimiento que Abril rindiera sus exámenes ahí, ya que era el único que podía aplicarlos de manera diferenciada, solicitud que fue aceptada por dicho Consejo. La solicitud fue remitida al establecimiento, firmada por ambos padres.

6. En efecto, nos negamos, como padres, e incrédulos ante la situación, a que Abril diera su examen de Educación Física con la misma profesora, ante lo cual, la dirección del establecimiento, nos comunicó que “de persistir la situación, para efecto de Actas eso obliga a tener una evaluación cuantitativa y para este caso tendría que ser la nota mínima o la que fije la docente bajo algún criterio pedagógico”, indicándonos también que la profesora había accedido a darle a Abril una nueva oportunidad.

7. Debido a nuestra reiterada negativa de enfrentar a Abril a la profesora que había, mediante un acto discriminatorio, provocado un trastorno post traumático, misma que se había declarado incompetente para colocar una calificación cuantitativa, la dirección del Colegio nos informa que (Abril) será “dada de baja quedando en la condición de Retirada para efecto de Actas”. Quiero detenerme, nuevamente, para aclarar que como Incompetente se define a la persona que no tiene la capacidad, pericia, aptitud o idoneidad suficiente para hacer cierta cosa, especialmente un trabajo, o para ocupar un determinado puesto.

8. Después de una publicación hecha en el muro personal de la Mamá (en la red social Facebook), el que alcanzó estatus de viral, y su correspondiente revuelo mediático, es la Dirección Regional de la Superintendencia de Educación la que nos comunica que se resolvió el requerimiento presentado ante esa repartición, donde se adjunta el Certificado de Promoción.

9. Señalar que, en ningún momento, como familia, ha sido nuestra intención denostar personas, sino que, exponer la situación que afectó a Abril, y el daño que un acto discriminatorio provoco en su día a día, a ella, a y su entorno directo e indirecto. Tampoco ha sido nuestra intención dañar a imagen de el Colegio, en cuyos docentes, para docentes, y personal auxiliar confiamos la seguridad física y emocional de nuestra hija.

10. Confiamos en que las acciones legales tomadas, podrán aclarar formalmente, y no una publicación sesgada a la defensiva en un medio electrónico local, la gravedad de los actos denunciados, y principalmente, acercarnos a la respuesta del porqué un grupo de profesionales actúa de la manera que lo hace, sin medir ellos las consecuencias de sus actos, amparados muy probablemente en la inercia de un sistema que sistemáticamente vulnera los derechos de las personas sin recibir sanción alguna.

Rodrigo Andrés Reyes
Ingeniero
Papá de Abril.


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